Dos recetas clásicas de guiso de conejo y una de algo llamado Kirsch-Milk, recuperadas de las ondas radiofónicas de hace 100 años:
Perdónenme Vds. que esta mañana no divaguemos pero hay una señora radioescucha que está esperando como agua de mayo un par de recetas de conejo, que le vamos a dar inmediatamente.
Lo más difícil de todo plato de conejo es estar en posesión de él, pero ya teniéndolo en casa lo demás es sencillísimo, y vamos a demostrárselo a Vds.
Convenientemente limpio, lo cortamos en trozos y los ponemos a macerar en una mezcla de una cuarta parte de vinagre para tres de vino tinto, que previamente habremos hecho hervir con un bouquet de hierbas aromáticas, colocando además en el adobo este unas rodajitas de cebolla fuerte.